A Esther Zemborain de Torres
Todas las cosas son palabras del
idioma en que Alguien o Algo, noche y día,
escribe esa infinita algarabía
que es la historia del mundo. En su tropel
pasan Cartago y Roma, yo, tú, él,
mi vida que no entiendo, esta agonía
de ser enigma, azar, criptografía
y toda la discordia de Babel.
Detrás del nombre hay lo que no se nombra;
hoy he sentido gravitar su sombra
en esta aguja azul, lúcida y leve,
que hacia el confín de un mar tiende su empeño,
con algo de reloj visto en un sueño
y algo de ave dormida que se mueve.
En El Otro, El Mismo (1964)
Foto: Borges by Gilbert Nencioli - Gamma Rapho - Getty Images
Tuve el privilegio de haber conocido a Borges personalmente, de haber cruzado con él unas cuantas palabras.
ResponderBorrarHe vivido ya casi mi vida toda, y no concibo dicha mas grande que esa.
Gracias a su humildad pude aceptar que era un ser humano, y no un presente divino, un don que nos regalaba el Altísimo.