A la ya larga lista de secuestros y asesinatos políticos cometidos en la Argentina se suma ahora la desaparición de dos conocidos escritores, Haroldo Conti y Daniel Moyano, secuestrados hace varias semanas. A estos dos secuestros hay que añadir los recientes asesinatos contra la persona del editor Burnichon y su hijo, dedicados ambos a la publicación y venta de libros de poesía. Haroldo Conti nació en 1925, en Chacabuco, Argentina. En 1962 recibió el Premio Fabril por su novela Sudeste. En 1966, el Universidad de Veracruz, por Alrededor de la sombra. Era Premio Barral de Novela, en 1971, por En vida.
Daniel Moyano, nacido en 1930, es una de las mayores figuras de su generación. Autor de varios libros de cuentos, pasa por ser uno de los mejores especialistas en el género y una de las mayores figuras de su generación. La lombriz (1964), El fuego interrumpido (1967) y Una luz muy lejana (novela, 1966) algunos de sus títulos. Por El oscuro, mereció el Premio Primera Plana, 1967.
Tanto uno como otro estaban empeñados en la construcción de la llamada nueva narrativa, y, aunque no se adscribían a tendencias realistas o sociologistas, no por ello renunciaban a la indagación de la realidad argentina.
Una comisión de escritores, presidida por Jorge Luis Borges y Ernesto Sábato, se han entrevistado recientemente con el presidente argentino, general Jorge Videla, para interesarse por su suerte. Videla les aseguró el respeto sagrado de su gobierno por la cultura, y prometió una investigación a fondo. Hasta el momento, sin embargo, se desconoce la suerte de los dos desaparecidos.
Por otra parte, un nutrido grupo de escritores españoles, encabezados por el editor y poeta Carlos Barral ha enviado un telegrama al presidente argentino, reclamando una urgente investigación del caso.
En El País, Madrid, sábado 12 de junio de 1976
Jorge Luis Borges en México, Foto ©Rogelio Cuéllar
Escribo para felicitar por la pagina y para pedir un favor. En algún momento recuerdo haber leido en un texto de Borges en el cual afirmaba que cuando uno recuerda algo no recuerda ese algo sino el último recuerdo de ese algo. ¿ Puede ser? Desde ya agradezco. Mi emal es carlosleiro@zc.com.ar, un saludo grande
ResponderBorrarUno nunca mira lo que ve.
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