11/12/15

Jorge Luis Borges: Camden, 1892







El olor del café y de los periódicos.
El domingo y su tedio. La mañana
y en la entrevista página esa vana
publicación de versos alegóricos

de un colega feliz. El hombre viejo
está postrado y blanco en su decente
habitación de pobre. Ociosamente
mira su cara en el cansado espejo.

Piensa, ya sin asombro, que esa cara
es él. La distraída mano toca
la turbia barba y la saqueada boca.

No está lejos el fin. Su voz declara:
Casi no soy, pero mis versos ritman
la vida y su esplendor. Yo fui Walt Whitman.



En El otro, el mismo (1964)
Imagen: Walt Whitman en Camden por Thomas Eakins (1887) Via


2 comentarios:

  1. Creo que el último verso del primer terceto tendría que ser "la turbia barba y la saqueada boca". Gracias por el blog! Un abrazo!

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  2. Muchísimas gracias, Marcelo. Ya lo hemos chequeado y editado.
    Nos alegran lectores tan atentos

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